UN MILAGRO PARA FLOR silvina_vicente@hotmail.com

ASIMILANDO EL DIAGNOSTICO : SORDERA PROFUNDA

Cuando descubrimos tu sordera Flor, lo que más nos angustió como papás es la imposibilidad que ibas a tener de poder disfrutar el maravilloso mundo del sonido. No nos preocupó el que fueras feliz, estudiaras y formaras una familia, porque estábamos seguros que la sordera no sería un impedimento para ello. Toda tu familia iba a brindarte el apoyo para que tu discapacidad no fuera un obstáculo para lograr tus metas. Pero, ¿si no pudieras comunicarte verbalmente?, ¿quién de tu entorno se preocuparía en entender tus señas en un mundo normoyente? Quizás sólo tu entorno más cercano. Acaso el expendedor de boletos, el cajero de un banco, tu obstetra, la vendedora en el shopping, tu maestra de inglés, etc. ¿ se preocuparían por aprender para vos el lenguaje de señas? Lamentablemente no. Y entonces la angustia de que siempre tendrías que depender de mí o de alguien más cada vez que quisieras comunicarte con un normoyente , situación que ocurre todo el tiempo en el transcurso de un día, me inundó, hasta que supe que había una posibilidad, no de que fuera feliz estoy segura de que eso lo lograrías de cualquier modo, había un milagro por venir : el implante coclear. IMPLANTE COCLEAR : EL MILAGRO

POR VENIR. LA DECISIÓN DE IMPLANTARTE

No fue demasiado difícil ni tuvimos que pensarlo demasiado, el hecho de que entraras al mundo del sonido, la posibilidad de que puedas transitar por esa experiencia maravillosa no nos permitió el egoísmo de pensar si estábamos haciendo lo correcto; si Dios había querido que tengamos un hijo sordo y así tenia que ser; si te estábamos negando como hija sorda; había escuchado bastante de esa filosofía, pero no creo en la identidad del sordo, creo en la identidad de las personas y mientras podamos ver, sentir y oír menos difícil será todo en nuestras vidas. DISCAPACIDAD. LA CIENCIA AYUDA A NUESTROS HIJOS Y aquello que Dios nos pone en el camino (la discapacidad por ejemplo) no es para que bajemos la cabeza y dejarlo así porque Dios lo quiso. Es para que luchemos y luchemos y lo intentemos hasta poder lograr una mejor calidad de vida. Acaso la madre del ciego no daría todo para que su hijo pudiera ver, acaso si la ciencia lo permitiría ella diría no, dejen todo así, Dios quiso que él no viera y así tiene que ser, quien le da ese poder a una madre, quien dijo que Dios reparte incapacidades para resignarnos.

IMPLANTE . EXPECTATIVAS, RESPONSABILIDADES, LOGROS

Y nos avocamos a implantarte, con toda la responsabilidad que ello implicaba, deje el trabajo para poder ayudarte día a día a reconocer los sonidos y pusimos todas nuestras energías en que lo íbamos a lograr. El lenguaje de señas si así lo desearas podrás aprenderlo en cualquier momento de tu vida y aplicarlo sin problemas. Pero implantarte no, no es algo que uno pueda tomarse todo el tiempo para hacerlo. Hoy en día, a solo dos meses del encendido entiendo que el milagro ha llegado, y el ver tu sonrisa todas las mañanas buscando con la mirada ansiosa donde esta tu implante como si no pudieras esperar un minuto mas sin oír, el verte jugar con tanto placer con todos esos juguetes sonoros a los cuales antes cuando no estabas implantada rechazabas, el poder sentarte en mis rodillas y leerte un cuento y que me prestes atención, no como antes que solo atinabas a tirarlo, el escuchar tu voz encantadora es todo un descubrimiento, el que puedas estar atenta al timbre o al teléfono o al ruido del microondas cuando antes con tus audis mas potentes no podías escuchar el tren que pasaba a unos pocos metros, la sonrisa dibujada en tu rostro cuando te habla tu hermano haciendo “cua cua” con el pato o yendo a buscar el perro a tu pieza cuando te pregunto ¿dónde esta el guau guau?, que digas “mamá”, que no quieras bañarte porque te tengo que sacar el implante. Sabes, antes de implantarte ni papá ni yo éramos conscientes de todo lo que no podías hacer, porque eras una nena super despierta, es como que uno no se da cuenta a pesar que yo tuve a tu hermano antes que a vos, pero hoy puedo ver que más allá de una nena que siempre estaba contenta hoy hay una nena que explora, que presta atención, que entiende y eso me pone muy feliz porque se que te hice las cosas mas fáciles Flor. CUESTIONAMIENTOS Un día seguro cuando seas mamá me preguntarás : ¿por qué me operaste mamá? Y yo te diré : que no hay placer más grande en la vida que poder escuchar de un hijo “ mamá te quiero “ y gracias al implante vos podrás comprender exactamente lo que te digo, porque habrás podido escuchar a tu hijo diciéndotelo.